Noticias

Noticias El sábado 5 de noviembre de 2011 se celebra el 6º aniversario de la derrota del ALCA en Mar del Plata. Con la presenica de los cancilleres de la Unasur, Edgardo Depetri honra la memoria de quien fuera presidente de nuestro país en aquel 2005, Néstor Kirchner ------ La Corriente Nacional de la Militancia realizó un acto en la cancha de Huracán el viernes 11 de marzo y respaldó a la principal oradora, Cristina Fernández, para un nuevo mandato como presidenta de la nación. Edgardo Depetri afirmó ante casi 100 mil personas que la movilización "recuerda a Néstor Kirchner como un militante y un compañero que vino a transformar a la sociedad. Este acto no tiene nada de especulación electoral" -------- Asistieron al plenario de la Corriente Nacional de la Militancia el gobernador de la provincia de Buenos Aires Daniel Scioli, el intendente de Quilmes, Francisco "Barba" Gutiérrez, el ex canciller Jorge Taiana, el legislador Daniel Filmus y los diputados Agustín Rossi y Edgardo Depetri, entre otras figuras destacadas y compañeros. Se realizó el 26 de enero en Mar del Plata --------- Amado Boudou y el diputado nacional Edgardo Depetri cerraron el 17 de diciembre el plenario federal del Frente Transversal Nacional y Popular, pensando en la ciudad de Buenos Aires. ---------El 20 de noviembre finalizó el Encuentro Latinoamericano del Libro Social y Político del Bicentenario. En representación del Frente asistió Juan Pablo O’Dezaille, quien se refirió a una nueva etapa, donde la cultura no está al servicio de una elite, entre otros temas

2010-11-01

Cultura y poder: de la resistencia a la ofensiva

Por Juan Pablo O Dezaille

Entre el 17 y el 20 de noviembre se llevó a cabo en la Biblioteca Nacional el Encuentro latinoamericano del libro social y político del Bicentenario. Participaron escritores, dirigentes sociales, políticos y académicos de distintos países. A continuación reproducimos alguna



Que estemos hoy en la Biblioteca Nacional compartiendo este encuentro con los distintos compañeros de diferentes organizaciones, es, sin duda, un signo de que vivimos un nuevo tiempo. Porque este Centro Cultural, una especie de templo del conocimiento, estuvo en muchas oportunidades al servicio de una elite. Una elite que tenía los mejores palacios, las mejores obras, las mejores expresiones artísticas y esta Biblioteca fue sin duda en algún momento de nuestra historia un símbolo fuerte de todo eso.
Hoy estamos en otro momento. Si bien hay una definición de cultura que dice que es “todo aquello que hacen los hombres y las mujeres” a mí me parece que esa es una definición un tanto amplia e imprecisa. Prefiero aquella de García Márquez que sostenía que cultura es: “la posibilidad de aprovechamiento social del conocimiento colectivo”. Si bien, doscientos años son muy pocos si los medimos en relación a la construcción de una Nación, en cuanto a esta pelea entre los dos modelos de país que mencionaron otros compañeros anteriormente, nos parece que en esa batalla hay momentos en que se producen hechos culturales asociados a políticas defensivas del campo popular y otros, donde los cultural está relacionado con acciones de ofensiva.
Así, como uno es partícipe de esa cadena de la construcción de lo nacional y popular, donde la historia no empieza cuando uno llega ni termina cuando uno se va, hoy lo que nos marca como eje central de la disputa por el poder es por un lado la lucha por la distribución de la riqueza pero por el otro, la pelea por el modelo cultural, por el sentido de ese proceso. La disputa por el relato como dice nuestra presidenta.
Pelearle a esas consignas del poder que venían de la larga noche de la dictadura, como esa que decía que “el silencio es salud”, fue una batalla muy importante entre otras que dio el campo popular por esa época. La vuelta de la democracia nos llevó a otro escenario muy diferente pero en el cual se plantearon diferencias de otro tipo con el alfonsinismo gobernante. Para el radicalismo su idea de lo cultural estaba asociada al espectáculo. Donde la cultura era algo hecho por pocos, pero que tenía cierta masividad en los receptores. Vistos en general como pasivos, frente a las representaciones artísticas. Donde la producción seguía estando en pocas manos. En aquellos que poseían una técnica y estaban legitimados para hacerlo.
Esta mirada restringida de lo cultural como productora de sentidos, dio paso a la mirada neoliberal, donde la concepción que primó fue que el poder lo discuten los poderosos, no puede haber proyectos colectivos. El individualismo, el no te metas, fueron configurando un escenario donde también se produjo una fuerte transformación de conceptos y de palabras en nuestro lenguaje cotidiano: en vez de pueblo, éramos opinión pública o gente, en vez de militantes, operadores políticos…
En esas políticas de resistencia que se empezaron a dar en esa época, que tomó formatos heterogéneos quizás debamos buscar los rastros de esta ofensiva no solo en lo económico-social sino también en lo cultural de hoy; donde tanto Néstor como Cristina constituyen símbolos fuertes de estas embestidas…
En esa época, la interpelación que se hacía desde el poder neoliberal a valores muy arraigados en nuestro pueblo como por ejemplo la cultura del trabajo, fue en muchos casos demoledora… Los compañeros se iban con un retiro voluntario, les iba mal a muchos de ellos en emprendimientos personales o familiares y la sensación que les quedaba era que ellos habían fracasado. No que había un sistema que los expulsaba y los marginaba del circuito productivo…
En ese sentido, los piquetes en la Matanza de la CTA, constituyen un punto muy importante de esa resistencia, porque no solo se daba desde una lógica asamblearia sino que planteaba que los desocupados no eran una suma de fracasos individuales sino que seguían siendo trabajadores y por lo tanto, había que seguir organizándolos…
Así llegamos al estallido del 2001, con esa consigna muy perniciosa y tramposa como era esa que decía: “que se vayan todos…” inclusive la otra que parecía más interesante: “piquetes y cacerolas, la lucha es una sola…” que duró hasta que se arregló el tema de los bancos y entonces se volvió a demonizar a los sectores populares… Este ejemplo es lo suficientemente claro que esta batalla por los dos modelos es también una batalla cultural que debemos dar permanentemente y sin concesiones…
¿Por qué decimos que detrás del que se vayan todos…había un discurso reaccionario? Porque lo que expresaba esa consigna era que la política era una mierda, no nos representa y entonces ¿quién nos va a gobernar? Cuando se pierde la centralidad de la política, los únicos que ganan son los poderosos…
Por eso en vez de confrontar proyectos políticos diferentes lo que prevalece es cuanto medía el riesgo país, los analistas planteando que tal vez era necesario que nos vengan a dirigir un comité de expertos, que quizás era mejor no tener moneda propia, que éramos todos un fracaso, que no servíamos para nada…
Pasábamos de ser los mejores del mundo, de la ficción del deme dos a ser incapaces de conducir nuestro propio destino…
La resistencia a esa mirada que se pretendía imponer de nosotros mismos desde el poder, es donde se va a posicionar el kirchnerismo para desmontar ese discurso planteándole a la sociedad en general y a los sectores populares en particular otros desafíos…
Hay dos cuestiones que sostuvo el kirchnerismo -más allá de múltiples acciones que llevo adelante en estos siete años- que le dieron legitimidad para diseñar otros horizontes: 1. Se terminó con las políticas sistemáticas de ajustes contra el pueblo argentino 2.- No hubo ningún acto más de represión estatal contra el campo popular. Y estos dos temas conforman definitivamente también un nuevo paradigma cultural.
La disputa por una cultura nacional y popular está abierta. La incorporación de sectores heterogéneos que se vieron reflejados en la multitudinaria asamblea popular en que se convirtió la Plaza de Mayo -con sus historias y sus fantasmas-, en el velorio de Néstor, así lo atestiguan. Estamos en un tiempo extraordinario con gobiernos progresistas en la mayoría de los países latinoamericanos. Cuando Kirchner llegó a la Rosada, dijo que no pensaba dejar las convicciones en la puerta. Sabemos que Cristina tampoco lo hará.
Esta también en nosotros redoblar la militancia para garantizar que este sueño popular alcance en el 2011, una nueva y necesaria victoria. Ese será seguramente nuestro mayor desafío pero también el más genuino de los homenajes, tanto a Néstor como aquellos que en estos doscientos años han venido batallando por la definitiva liberación de nuestra Patria…

Esa Plaza

Por Pablo Castillo

Los finales de los ochenta y principios de los noventa vinieron acompañados no solamente de una reconversión del Estado, los flujos financieros y las recetas del Fondo, sino que también asistimos a los efectos que la Revolución Científico-Técnica producía sobre las construcciones de identidades y territorios. Las modalidades en que se configuraban las prácticas sociales y culturales estaban atravesadas por los nuevos paradigmas comunicacionales. Los términos en que los saberes y las experiencias populares se expresaban y se legitimaban eran puestos en cuestión por los diferentes lineamientos que imponía el proceso globalizador.





Los grandes acontecimientos adquieren su punto de inflexión y naturalización a través de una suerte de combinación desigual y asimétrica entre imágenes individuales y colectivas. Las patas en la fuente de Juan Molina, en la Plaza de Mayo el 17 de octubre de 1945, o el “Era el subsuelo de la Patria sublevada” en la definición de Scalabrini, funcionaban como registros articulados (el singular y el general) inscriptos en una misma coordenada. Después, la capacidad polisémica de gestos, actos, silencios, reinterpretaciones, terminarían configurando la escena y la proveerían de entidad y proyección histórica.

El imaginario del progreso y de la movilidad social ascendente, expresión simbólica fuerte del modelo nacional y popular, que había entrado en crisis principalmente a partir de los noventa pero que seguramente los orígenes de esa crisis deban ser rastreados en el Golpe Militar de 1976, empiezan a ser recuperados como un valor, pero también como una ilusión cada vez más determinante, por amplios sectores, en los últimos siete años.

El peronismo ya no tiene la capacidad para expresar (si alguna vez la tuvo) a la totalidad de lo popular, pero sí parece estar en condiciones de demostrar que en el proceso de implementación y gestión de políticas públicas se producen o se puede ayudar a producir una articulación -a veces imperceptible- entre nuevos y viejos actores sociales con diferentes despliegues de la subjetividad.
La Plaza que despidió a Néstor Kirchner no era la del 45. Tampoco la del 52 con Evita. Menos la de Perón en 1974. Porque, entre otras cosas, ni la Argentina ni nosotros somos los mismos. Igualmente, dar cuenta de esas diferencias supone un tratamiento desde otros lugares que trascienden a este texto.

En todo caso, hay dos preguntas que nos parece pertinente hacernos desde acá: en primer lugar, ¿por qué esa heterogeneidad social, de personas, grupos etarios, colectivos sociales, políticos, culturales, podían compartir solidariamente un mismo espacio público expresando su dolor, su tristeza infinita, pero también su esperanza? En segundo lugar, ¿por qué en la era de la información, de la noticia al instante, de la transparencia de los hechos, no se pudo conceptualizar que determinados colectivos –muchos de ellos minoritarios- habían encontrado eco a sus demandas, quizás impensadamente, en ciertas decisiones del Gobierno?

Estas preguntas no están planteadas desde la inocencia ni desde el desconocimiento del peso que tienen los multimedios corporativos para formatear los modos en que ordenan hegemónicamente las prioridades de los temas que eligen comunicar, pero la presencia espontánea de miles de jóvenes –muchos de ellos pertenecientes a la clase media urbana- debería llevarnos a reflexionar sobre lo que esa foto expresa en términos comunicacionales y culturales y que no estaba presente en toda su dimensión, en ninguna de las hojas de ruta previa, en propios y extraños.

La construcción de una nueva ciudadanía o ciudadanía ampliada especialmente en nuestros países periféricos, desiguales y latinoamericanos constituyen una serie de preocupaciones que viene desvelando, ya desde hace algunos años, a importantes teóricos del campo comunicacional y de otras disciplinas. Si hay alguna enseñanza que dejó la Plaza en estas Otras 48 horas, es que no hay posibilidad de hablar de ciudadanía -tensionando las connotaciones liberales que aún el término conlleva- sin hacer referencia a sujetos concretos que la encarnen ni colectivos reales que la expresen.

Fijando vértigos

Por Daniel Rosso.

Cristina Fernández es de esa misma estirpe. Por eso dice, de inmediato: “No vamos a cambiar justo ahora”. Justo ahora que el exceso, que la invención política, comenzó a agitar la energía joven de la nación que es como decir comienza a tomar velocidad el futuro.

Esa mujer. Ese hombre. Esa mujer bella y precisa en su silencio. Altiva en su movimiento breve. Arrojada a su definitiva mezcla de fortaleza y debilidad. Esa mujer de exquisita quietud y serenidad. Esa mujer, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, y ese hombre, Néstor Kirchner, en el plano detenido de la despedida final, integran, más que nunca, el grupo selecto para los que, al decir de Rimbaud, vivir es fijar vértigos.





Son los que desencadenan la potencia, la invención, el vértigo, y en simultáneo, lo van fijando, le van dando forma, dimensión posible. Son los que no acostumbran respetar el tiempo. Su ritmo. Su devenir monótono. Prefieren el exceso. No conocen el círculo: ese volver al mismo lugar por miedo a la pérdida. No toleran el retorno: eligen el despliegue incesante sobre una línea siempre ascendente en la que hay deriva, hay avance, hay retroceso, hay invención y hay cambio. Son, como decía Alain Badiou de Deleuze, los que se animan a vivir como inmortales. “Aquellos que exponen tanto como se puede al animal humano a lo que lo excede.” Eso es: exceso. Lo que en estos días se tradujo como correr los límites de lo posible. Inventar aquello que en el horizonte de una coyuntura se desecha por irrealizable. El exceso es la invención política. Eso que pone en tensión las administraciones, las rutinas seguras, la repetición cómoda de lo que garantiza el retorno circular a lo mismo. Y sus efectos no siempre tolerables: la famosa crispación, es decir, cierto zarandeo, cierta producción de intranquilidad, de incomodidad, el avance hacia nuevos lugares, los recorridos inesperados sobre los límites. Lo contrario de la política gerencial de los ’90: la que administraba lo existente en lugar de inventar lo que aún no existía. Aun cuando estas invenciones basculan en escenarios enrevesados de viejos aparatos, caudillos, militantes y dirigentes que preferirían la inmovilidad de lo que ya se venía repitiendo.

En el medio de esa mezcla abismal entre lo viejo y lo nuevo, ese hombre, Néstor Kirchner. El hábil malabarista capaz de producir novedad con parte de lo viejo. O forzar lo viejo para ponerlo al servicio del cambio. Lo sabemos: ese hombre vivió fijando vértigos. Desplegando las potencias y marcando sus límites. Vivió como inmortal. Puso su vida bajo el rigor del peligro y de la novedad. Y Cristina Fernández es, sin dudas, de esa misma estirpe. Por eso dice, de inmediato: “No vamos a cambiar justo ahora”. Justo ahora que el exceso, que la invención política, comenzó a agitar la energía joven de la nación que es como decir comienza a tomar velocidad el futuro. Porque esos miles de jóvenes desfilando de modo incesante frente a Néstor Kirchner, como acto militante, como acto expresivo, llevando sus palabras, sus discursos, nos hablaron del futuro, de la velocidad, del ritmo, de nuevos sentidos para ese futuro.

El velatorio de Néstor Kirchner fue ese tiempo misterioso donde coincidieron una partida y una llegada. Se fue Néstor. Llegaron miles de jóvenes. Estaban. Pero no los habíamos visto juntos. No todos sabíamos que eran tantos. Que eran tan osados, tan sensibles, tan admirables. No sabíamos que el vértigo y el exceso de la pareja gobernante se habían desplegado, entre miles de jóvenes, como la nueva razón en una sociedad siempre un poco loca en su inconsistente demanda de beneficios y descompromiso. Ahora se hicieron visibles y ahora ya son objeto de captura de los grandes medios. Ya comenzaron a preguntarse sobre su lugar. Y a intranquilizarse: ¿y si los jóvenes son el sujeto donde Cristina Kirchner decide sostener la radicalización de su gobierno? Cunde el pánico.

“En cuanto al rol de los jóvenes kirchneristas... viene asomando una sospecha, que agita las aguas ya suficientemente encrespadas de la política argentina: la de un ‘kirchnerismo recargado’, que tome mayor distancia del peronismo tradicional, refuerce lazos con los movimientos sociales y ‘gire a la izquierda’”, –sintetiza en Clarín Marcos Novaro, uno de los intelectuales de la Alianza en los comienzos de esta década. Para colmo, jóvenes con vocación de inmortales, no responden a rígidas fronteras partidarias. Aplaudieron durante dos cuadras en Plaza de Mayo a Martín Sabbatella, relata otro medio preocupado por esta proliferación inesperada de nestorcitos y cristinitas adeptos al fluir del exceso y la novedad.

Lo dijimos: Néstor y Cristina han producido cambios con parte de lo viejo. Pero el producto social de esos cambios –estos jóvenes con vocación por el vértigo– no se alinea ni se motiva ni se inspira con lo viejo. Los mueve el gusto por la novedad, la ruptura y la invención política. Y sus resultados, materiales y simbólicos. Dignidad, casas donde vivir, jubilaciones, orgullo, nuevas escuelas, autoestima, trabajo, agua potable, etc., etc. La corriente continua que conecte esta sensibilidad joven con las rutinas del Gobierno y del Estado deberá estar alimentada por una agenda de ruptura, de cambio y de invención. Si lo viejo acompañó el cambio, a veces a los empujones, lo nuevo, estos jóvenes, han sido producidos por ese cambio. Lo demandan, lo promueven y lo respiran.

Frente a ellos, ya agazapados, los grandes medios como maquinarias de captura. Siempre preparados para utilizar su potente artillería simbólica en la captura de nuevos fenómenos y construirles una identidad. Mientras más cerca esté un nuevo actor de expresar intereses populares más negativa será esa construcción. Mientras más comprometido esté con el proceso de redistribución de la renta más amenazada de captura estará su identidad. Así, representantes sindicales, piqueteros y dirigentes políticos populares o son invisibilizados o son construidos con identidades negativas. Por supuesto, hay dirigentes que se merecen esa construcción. Pero los aparatos de captura lo hacen en general: su objetivo es ilegitimar el lazo representativo. Intentan barrer con toda representación social legitimada.

En su libro Fin de Ciklo, Rosendo Fraga afirma que el movimiento piquetero “está encabezado por lideres que cuentan con apenas el 1 por ciento de imagen positiva y sus protestas la apoyan sólo el 2 por ciento de la opinión pública”. Los medios concentrados intervienen gestionando la distribución de la legitimidad. Hubo cortes de rutas y de calles por actores que pugnaban por concentrar la renta –la cadena agroindustrial– y por actores que buscaban distribuirla –dirigentes sindicales y sociales–. Los primeros acopiaron imagen positiva y lograron protagonismo electoral. Los segundos acumularon imagen negativa y, la mayoría, inviabilidad electoral. Lideres agrarios legitimados. Líderes sociales estigmatizados. En el medio, los grandes medios: aparatos de captura de las identidades emergentes.

Al fin algo les falló: en simultáneo a sus operaciones, una épica silenciosa se fue desplegando entre jóvenes –pero no sólo entre jóvenes– para irrumpir ante el féretro del líder como una fuerza instituyente tan secreta como desbordante. El exceso no había sido capturado. No del todo. Por lo menos no en estos jóvenes y no jóvenes. Pero los aparatos de captura son implacables. Irán por ellos. Intentarán construirles identidades oscuras. La historia también es la puja entre los aparatos de captura simbólica y el exceso, el vértigo, lo que se les escapa, lo que se instituye en su diferencia. Y como motor y como fuerza de ese exceso están los inmortales. Ese hombre, esa mujer y los miles de jóvenes y no jóvenes que, hoy más que nunca, eligen el rigor del vértigo y la novedad.

Veinte de noviembre: día de la soberanía nacional

Para 1842, Inglaterra y Francia analizaban una nueva posibilidad de intervención en nuestros territorios, esta vez combinando las fuerzas militares de ambas naciones.




Desde sus lógicas, no era admisible que los pequeños países surgidos de la herencia española obraran como si fueran Estados en uso pleno de su soberanía y se negaran a recibir los beneficios de la “libertad de comercio, tutelaje internacional, libertad de sus ríos navegables” que le ofrecían las "naciones comerciales". Había que hacer, en primer lugar, de la ciudad de Montevideo una factoría comercial, de propiedad común anglo francesa, desde donde dominar la cuenca del Plata. Después, establecer la ley de los mares “es decir, su libre navegación” a los ríos interiores argentinos, y finalmente dividir en mayores fragmentos esa Confederación Argentina que Juan Manuel de Rosas se había empeñado en mantener incólume del naufragio del antiguo y extenso virreinato del Plata.

Hay una nota conjunta que le dirigen a Rosas los ministros de Inglaterra y Francia en Buenos Aires (Mandeville y De Purde) apenas producida la batalla de Arroyo Grande. (Diciembre de 1842) donde decían textualmente: “Prohibíase ayudar a Oribe a recuperar su gobierno oriental” y se amenazaba con tomar las medidas consiguientes si los soldados argentinos atravesaban el Uruguay en unión con los orientales para expulsar las legiones extranjeras que mantenían a Montevideo. Pero Rosas quedó sordo a las amenazas: contestó poco más o menos que en las cosas argentinas y orientales mandaban solamente los argentinos y los orientales. Consecuente con su respuesta el ejército aliado de Oribe, atravesó el Uruguay, y en febrero de 1843 empezó el sitio de Montevideo, defendida por las legiones extranjeras y por el almirante inglés Purvis.

En febrero de 1843 esperábase por momentos la intervención conjunta amenazada por la nota de Mandeville y De Lurde que Rosas había osado desafiar. Pero no llegaba. Es que ese año no había sido propicio para la relación entre esos dos países europeos amenazada de quebrarse por la cuestión del matrimonio de la joven reina de España. Sin embargo, en 1844 las cosas mejoraron y la relación cordial entre Inglaterra y Francia pudo reanudarse.

Obligado (20 de noviembre)

El 30 de agosto la escuadra aliada íntima rendición a Colonia, que al no ser acatada es desmoronada a cañonazos. Al día siguiente. Garibaldi, con los barcos argentinos, de los que ahora es dueño, participa en este acto y se destaca en el asalto que siguió. El 5 de septiembre los almirantes se apoderan de Martín García: Garibaldi, con sus propias manos -que más tarde serían esculpidas en bronce en una plaza de Buenos Aires-, arrió la bandera argentina. De allí la escuadra se divide. Los anglofranceses remontan el Paraná, mientras Garibaldi toma por el Uruguay y sus afluentes: el corsario se apodera y saquea Gualeguaychú, Salto, Concordia y otros puntos indefensos, regresando a Montevideo con un enorme botín de guerra. Mientras tanto Hontham y Trehouart navegan el Paraná en demostración de soberanía, y para abrir comunicaciones con su ejército "auxiliar" que, al mando del general Paz, obraba en Corrientes. Pero el 20 de noviembre, al doblar el recodo de Obligado, encuentran una gruesa cadena sostenida por pontones que cerraban el río, al mismo tiempo que baterías de tierra iniciaban el fuego.

Es el General Mansilla, que por órdenes de Rosas ha fortificado la Vuelta de Obligado y hará pagar caro su cruce a los interventores. Al divisar los buques extranjeros ha hecho cantar el Himno Nacional a sus tropas y ha abierto el fuego con sus baterías costeras. Hontham y Trehouart contestan y llueven sobre la escasa guarnición argentina los proyectiles de los grandes cañones de marina europeos. Como señala el historiador José María Rosa “Siete horas duró el combate, el más heroico de nuestra historia (de las 10 de la mañana a las 5 de la tarde). No se venció, no se podía vencer. Simplemente, quiso darse a los interventores una serena lección de coraje criollo. Se resistió mientras hubo vidas y municiones, pero la enorme superioridad enemiga alcanzó a cortar la cadena y poner fuera de combate las baterías”.

Bizarro hecho de armas, lo califica Inglefield en su parte, desgraciadamente acompañado por mucha pérdida de vidas de nuestros marinos y desperfectos irreparables en los navíos. Tantas pérdidas han sido debidas "a la obstinación del enemigo", dice el bravo almirante. ¿Se ha triunfado? La escuadra, diezmada y en malas condiciones, llega a Corrientes, y de allí intenta el regreso. En el Quebracho, cerca de San Lorenzo, vuelve a esperarla Mansilla con nuevas baterías aportadas por Rosas. Otra vez un combate, otra vez "una victoria" -el paso fue forzado- con ingentes pérdidas. Desde allí los almirantes resuelven encerrarse en Montevideo; transitar el Paraná es muy peligroso y muy costoso. Se deshace el proyecto de independizar la Mesopotamia gestionado por los interventores en el tratado de Alcarás porque Urquiza ya no se sintió seguro. Se deshace la intervención. Poco después -13 de julio de 1846- Samuel Tomás Hood, con plenos poderes de Inglaterra y Francia, presenta humildemente ante Rosas el "más honorable retiro posible de la intervención conjunta". Que Rosas lo haría pagar en jugoso precio de laureles. Por eso, el 20 de noviembre, aniversario del combate de Obligado, es para los argentinos el Día de la Soberanía.
José de San Martín desde el exilio comprendió como pocos la importancia estratégica de este acontecimiento legando a Rosas -por disposición testamentaria- el sable con el que luchó por la independencia. Francisco José Pestanhaa sostiene que “la autoafirmación es un mecanismo psicológico mediante el cual reforzamos las propias ideas, poderes, fortalezas y habilidades. En su faz colectiva, constituye un dispositivo de cohesión social mediante el cual nos reconocemos positivamente como parte de un todo entrelazado por la solidaridad”. Obligado en particular pero en especial el rechazo a un bloqueo impuesto por dos potencias coloniales, constituye un evento que habla nítidamente como pueblo de nuestra capacidad colectiva subyacente o como también señala Pacho O'Donnell refiriéndose al 20 de noviembre “Fue una metáfora a cañonazos de la alianza entre sectores de la dirigencia local y los intereses de poderes internacionales en contra de la Patria y de las grandes mayorías, algo que lamentablemente recorre toda la historia de nuestro país. Es, en ese sentido en que el Poder Ejecutivo Nacional comprendiendo su magnitud, acaba de decretar felizmente ese día, como feriado nacional.

A un mes del asesinato de Mariano Ferreyra

Por Norberto Galasso

Como sostuvo Juan Pablo O Dezaille en el plenario de agrupaciones sociales en el Bauen, el Frente Transversal se solidariza con los compañeros del Partido Obrero y sostiene que el asesinato de Mariano es un ataque a toda la clase trabajadora y al pueblo argentino en su conjunto. Por lo tanto, exigimos que la Justicia llegue a determinar no solo quienes fueron los autores materiales sino los intelectuales de este crimen. A continuación reproducimos una nota del compañero Norberto Galasso haciendo un análisis político de este acontecimiento:







Un joven militante ha sido asesinado y una enorme congoja ha
conmovido al pueblo argentino, más allá de disidencias ideológicas que
puedan existir con el partido al cual pertenecía. La víctima fue Mariano Ferreyra y el respeto y el dolor van más allá de la polémica de ideas. Pero la Historia enseña que generalmente, en escenarios de dura pugna política, no existen balas perdidas", ni hechos fortuitos, ni casualidades.

El balazo que puso fin a la vida de este muchacho que, equivocado " o no, ansiaba un mundo mejor, fue dirigido al creciente protagonismo de los trabajadores y a un gobierno que, con toda razón, se precia de no reprimir. Un periodista conocido había anticipado que "podía haber u muerto", es decir, la reacción necesitaba un muerto para descalificar los avances de la C.G.T. y del gobierno de Cristina y así demostrarle a los sectores medios que "sindicalismo" equivale a "patota" y "Kirchnerismo"
equivale a "autoritarismo", para que se convenzan, según otros personajes,
que "el gobierno es de derecha" y "continuación del menemismo".

Si bien carecemos de la total información, cabe reflexionar acerca de quiénes se han valido los sectores oligárquicos para este trágico operativo político. Cuando un movimiento nacional y popular, como el peronismo, se desbarranca por un tiempo en la degradación -como ocurrió durante el menemismo- por importante que sea la recuperación, quedan siempre elementos residuales en el sindicalismo -hoy minoritarios- en los que continúan los vicios de burocratización, corrupción y patoterismo, así como rebrotan de su
dirigencia política algunos traidores que pretendiendo hipócritamente recoger las viejas banderas, aparecen como "disidentes"... Y lo son, con el progreso social y complaciente con los poderosos.

Los datos que se poseen permiten suponer que desde allí provino el ataque. El momento en que se produjeron los hechos tiende a confirmar la hipótesis: consolidación de los sectores más avanzados en la C.G.T., crecimiento de los Kirchner en las encuestas, proyecto de distribución de utilidades de las empresas a los trabajadores, avances en la lucha contra el monopolio mediático, consolidación del UNASUR, acto en River, y a su vez, impotencia e ineptitud en la dirigencia política
opositora, en sus diversas expresiones.

En este cuadro, los sectores reaccionarios, de adentro y de afuera, clamaban por un muerto para endosarle la responsabilidad a la C.G.T. y al Gobierno. En el mejor momento, jugó lo peor que provenía de aquella degradación. Para quebrar el intento es preciso, con urgencia, sancionar duramente a los responsables, sin concesión alguna, no solo en nombre de los derechos humanos, sino en defensa del progreso social, económico y político que venimos logrando, al cual no podrán interrumpir ni con urnas, ni a balazos, si ratificamos el rumbo y convertimos a la movilización popular en garantía de su avance y profundización.

Hospital de Lugano otra promesa de campaña no cumplida por Macri

La Justicia porteña les impuso al jefe de Gobierno, Mauricio Macri, y a su ministro de Salud, Jorge Lemus, una multa de 100 pesos diarios y un embargo de 3200 pesos sobre sus haberes por el presunto “incumplimiento” de la construcción de un hospital público en el barrio de Villa Lugano. Allí, hace poco más de un año, fue inaugurado un edificio donde funcionan 37 consultorios, pero nunca se inició la segunda etapa, que incluiría la guardia, quirófanos y salas de internación.





La medida judicial fue adoptada por la jueza en lo contencioso administrativo Elena Liberatori, en un recurso de amparo iniciado por la Comisión de Vecinos Lugano en Marcha, ante las demoras en la conclusión de la obra. La jueza libró un oficio a la Dirección de Recursos Humanos del gobierno porteño, que debería recaudar el dinero de los sueldos de Macri y Lemus para, luego, depositarlo “en una cuenta que deberá abrirse a tal efecto en el Banco de la Ciudad de Buenos Aires, sucursal Tribunales”.
La construcción de un hospital que atienda a la población de Villa Lugano, Villa Soldati y Villa Riachuelo es un viejo reclamo de los habitantes de esa zona, que quedó plasmado en una ordenanza sancionada en 1986 y en una ley votada por la Legislatura en 2005. La gestión de (Jorge) Telerman planteó la construcción en tres etapas y lanzó la licitación de la primera, que consistía en la construcción de los consultorios. La edificación se inició avanzada la gestión de Macri y la inauguración de la primera etapa fue el 10 de junio del año pasado.
“Hace un año debió haber comenzado la segunda etapa”, le dijo a Página/12 Gustavo Moreno, quien hasta hace unos días era asesor tutelar de menores de primera instancia y ahora cumple la misma función ante la Cámara de Apelaciones porteña. “La jueza le dio un año de plazo al gobierno para que inicie la obra, bajo apercibimiento de multa y, una vez vencido, solicité que se haga efectiva la sanción”, agregó el funcionario judicial.
“Para ellos, el hospital está terminado”, dijo Moreno, en referencia a las respuestas que dio el Gobierno de la Ciudad. Lo que hoy funciona como hospital, en la avenida Fernández de la Cruz y Escalada, son 37 consultorios de odontología, pediatría, clínica médica y ginecología, donde, según la información oficial, “en lo que va del año se atendieron a 10 mil chicos y sólo en septiembre se hicieron 7 mil consultas médicas”.
Para el asesor tutelar, “más que un hospital, es un centro de salud integral que, por ejemplo, no tiene guardia”. Según las fuentes judiciales, la multa y el embargo estarán vigentes hasta tanto el gobierno “demuestre con el sustento documental pertinente haber tomado las decisiones respectivas para la construcción de las obras correspondientes a la segunda etapa del denominado Hospital Lugano”. Los embargos se justifican en que las multas son retroactivas e involucran a los 32 días anteriores a la decisión judicial, lo que da un total de 3200 pesos. Es necesario que desde las agrupaciones políticas y sociales de la Comuna 8 conformemos un ámbito que nos permita debatir y profundizar esta lucha por el Hospital de Lugano ya que las posibilidades de atención en el segundo nivel para estas comunidades –los hospitales Piñero, Santojanni o Penna- no solo se encuentran desbordados sino que suponen en muchos casos la toma de al menos dos colectivos para poder acceder a ellos.

Si Nike es la cultura, Nike es tu cultura

Por Marcelo Clingo


Este verso de un tema de Los Redondos, puede ser leído en clave gramsciana. ¿Qué es lo que está en juego en el consumo de las Nike? ¿Por qué las Nike son un emblema para miles de jóvenes en la sociedad que nos toca? ¿Se puede hablar de hegemonía? ¿Por qué? ¿Es posible ubicar al Indio Solari, en el lugar de un cuestionador de la cultura instituida del sentido común?






Las letras del Indio, lejos de ser transparentes y sencillas, gozan de una poética abigarrada y compleja. Plagada de metáforas, y alusiones literarias.
Sin embargo, y a contrapelo de algunas observaciones vanguardistas, calan muy profundo en varias generaciones, en adolescentes y jóvenes.
Probablemente su conducta, su posición ética intransigente, y la lógica de la difusión de “Los Redondos”, hayan generado un fenómeno cultural decididamente contra hegemónico.

Es en el ámbito de los más pobres donde verdaderamente ha despertado pasiones, seguramente haciendo sentido en la vastísima tradición rockera muy afincada, que trasciende varias generaciones.
No es inocente que el Indio mencione a Nike, como ícono de la cultura consumista.

Se ha consolidado en esta última década un fenómeno cultural en los jóvenes de los sectores populares, consistente en la hiprervaloración de las zapatillas. Una suerte de fetichización, que establece un lugar de privilegio al artículo.
De qué marcas son la “llantas”, asigna status, cristaliza jerarquías.
Miles de peleas se presentan bajo la forma del arrebato o la defensa de las zapatillas.

Quién es más capo, quién tiene más aguante, encuentra referencias determinantes, en el tipo y la marca del calzado que lleva.
Es a este sentido común, cristalizado e irreflexivo, que el Indio viene a cuestionar. Desenmascara, con una frase directa, contundente, apasionada, lo falso de aquella disputa. Interpela al fanático, al ricotero, que hace lugar a la palabra del Indio, acerca de su relación con el consumo, el modo en que establece sus valores.

No se sitúa a la vanguardia, no baja línea, no desestima su saber, ni sus pasiones, los interpela. Nada más parecido a lo que señala Gramsci en la siguiente frase: “No debe tener la “soberbia” ni científica, ni moralizante, no deben ser filisteas y académicas, ni aparecer fanáticas o exageradamente partidarias: deben ponerse en el campo mismo del sentido común, tomando la distancia necesaria que permite la sonrisa burlona pero no despreciativa o de altanera superioridad”.
Esa celebración multitudinaria, que supone cada recital del Indio, esa movilización reinvidicativa, esa afirmación de la identidad, contiene “núcleos de buen sentido”, y es a esos núcleos donde se dirige la palabra del Indio.
Qué es sino, cuando los medios hegemónicos, y el sentido común, los estigmatizan como violentos, develar que “violencia es mentir”.

Ahora bien no es el Indio Solari, parte de una estrategia integral, diseñada y centralizada, de ascenso de los sectores subalternos. No es expresión, de una rama cultural de un frente, o movimiento que tiene por finalidad provocar una crisis orgánica en el bloque histórico, o propiciar la difusión de una línea ideológica transformadora.

En mi opinión, la revolución activa a la que refiere Gramsci, se compone de infinitos actos, requiere de una multitud de reflexiones y movimientos inarticulados, sin centralidad, que condicionan la superestructura, que mellan su legitimidad, que socavan su consenso. La crisis orgánica del bloque histórico, deviene de las limitaciones de reproducción de este bloque, pero se encuentra determinada dialécticamente por la capacidad de los sectores subalternos de empujarla.

El modo en que se popularizó, y alguna manera se construyó un mito urbano, en torno a la muerte de Walter Bulacio, da cuenta de una construcción cultural, que cuestiona el gatillo fácil, y sitúa la represión policial, como herramienta de dominación y sometimiento hacia los más pobres. Lejos de pretender ser una conclusión definitiva los hechos del 19 y 20 de diciembre del 2001, supusieron un catalizador de parte de estas construcciones de identidad popular, que encontraron un canal de legitimación, frente a la invisibilidad de la que gozaban hasta entonces.

Si se trata de voluntarizar, unificar y organizar, podríamos decir que el aporte del Indio se sitúa en la primera de estas tareas. Quedará para el príncipe Moderno, las otras dos, asumiendo el formato que le depare este tiempo histórico. Para muchos ese proceso ya comenzó para otros todavía está por constituirse.

Papel, prensa y participación

Convocados por el Ministerio de Economía y Presidencia de la Nación se realizaron en la Biblioteca Nacional un Foro de análisis sobre la fabricación, distribución y comercialización del papel para Diarios. A continuación publicamos el informe presentado por los compañeros Juan Pedro Gallardo, Emiliano Delio y Pablo Castillo por el Frente Transversal Nacional y Popular sobre este tema:





La libertad de publicar las ideas por la prensa sin censura previa está resguardada por el artículo 14 de la Constitución Nacional y es uno de los pilares en los cuales se basa el sistema representativo democrático.
Pero para publicar, además de las ideas, se necesitan ciertas herramientas, como la imprenta y el papel. La libertad de imprenta está garantizada por el artículo 32 de la Constitución Nacional, porque protege a este método industrial de reproducción de textos (el único cuando se redactó la primera Carta Magna en el siglo XIX) de las posibles restricciones del Congreso o del Poder Judicial de la Federación.

Este es uno de los puntos por los cuales las coronas con sus estados absolutistas monárquicos eran cuestionados. De hecho, en la Francia del siglo XVII, cuando apareció el primer periódico,
La Gazette, su titular tenía una imprenta con una Licencia Real. La autorización del rey permitía difundir solo ciertos pensamientos.
Con las revoluciones liberales en Europa y la independencia de América Latina, florecieron en los países cientos de periódicos con distintas formas de ver la realidad e interpretar los hechos.

En la Argentina, con niveles de alfabetismo alto para 1913, se vendía el diario de mayor tirada en español: Crítica con más de 350 mil ejemplares.
Sin embargo el país no contó muchas veces, a largo de la historia, con el insumo básico para imprimir como el papel. En la Argentina de 1968, el Estado buscaba crear una empresa que produjera este elemento y garantizara la autarquía. Una mayor producción significaría no depender del mercado externo y las importaciones. De esta manera las grandes imprentas de los diarios tendrían acceso sin privaciones al bien básico. El problema principal, fue que no se planteó claramente cuál sería el rol de Estado, que terminó siendo socio de algunos privados.

La materialización del proyecto se produjo durante la última dictadura militar, cuando en 1978 empezó a funcionar Papel Prensa S.A. Esta empresa se conformó a través de una operación comercial signada por delitos de lesa humanidad contra sus anteriores propietarios que al día de hoy continúa siendo investigada por el Poder Judicial, e incluyó la participación de los 3 diarios de la ciudad de Buenos Aires, que difundían posiciones favorables a los jerarcas autoritarios y a su gobierno de facto.

Aunque se logró que no se dependiera tanto de las importaciones de papel, el Estado se asoció con ciertos actores privados, favoreciéndolos. La situación, con algunos cambios, prosigue hasta nuestros días, con el Grupo Clarín dueño de un 49% del paquete accionario, La Nación con el 22,50% y el Estado con 27,50% (un 1% restante está en manos de terceros como TELAM).
Esto está en contradicción con el Pacto de San José de Costa Rica (PSJCR), que tiene rango superior a las leyes y está incorporado a la Constitución en el artículo 75 inciso 22. De este tratado internacional se infiere que el Estado no puede favorecer a determinadas voces, asociándose a una empresa que tiene una posición dominante en el mercado, dejando al resto de los diarios desprotegidos por que no poseen ninguna acción de dicha empresa. Hoy el Estado Nacional sigue junto a Clarín y La Nación, ambos de la ciudad de Buenos Aires, controlando, a través de su empresa Papel Prensa S.A., la producción anual de más de 160 mil toneladas de papel periódico (el 75% de lo consumido en el país).

De acuerdo a la Convención Americana de Derechos Humanos o PSJCR, la libertad de pensamiento o expresión descripta en su artículo 13, también incluye las herramientas utilizadas para lograr tal derecho. En su inciso 3 se establece: “No se puede restringir el derecho de expresión por vías o medios indirectos, tales como el abuso de controles oficiales o particulares de papel para periódicos, de frecuencias radioeléctricas, o de enseres y aparatos usados en la difusión de información o por cualesquiera otros medios encaminados a impedir la comunicación y la circulación de ideas y opiniones.”

Los perjuicios de Papel Prensa S.A., una empresa que ocupa una posición dominante en el mercado del papel para periódicos, es que los restantes casi 200 diarios dependen de ella para poder salir a la calle. Y se puede pensar que existe una competencia desleal, ya que el precio que pagan, no siempre es el mismo para sus dueños, Clarín y La Nación.
Los diarios que no pueden o no le compran a Papel Prensa S.A., deben recurrir a la importación, con precios que llegan hasta el 50% más caro. De hecho el 25% del papel consumido en Argentina para periódicos, proviene del exterior, calculado en más de 75.000 toneladas.

Al declararse la producción de papel como de interés público, se busca aumentar las inversiones para poder abastecer al mercado interno en su totalidad y garantizar un tratamiento justo e igual en precio, contratos y volúmenes de papel para todos los diarios del país.
Mayor pluralidad y cantidad de diarios significa fortalecer el Federalismo, dar cuenta de la polifonía existente e incrementar las posibilidades de acceso a la información y a los actos de gobierno. A su vez, estimula la participación y enriquece a la sociedad civil en el debate sobre las cuestiones que hacen a la vida en comunidad.

El ejercicio pleno de la ciudadanía no sólo tiene que ver con el goce de derechos sino también con el respeto a la diversidad cultural y el reconocimiento de las diferencias. Está bien que tales consideraciones sean tenidas en cuenta, hoy mucho más que antes, en el plano discursivo, pero resulta imperioso recrear soportes y estructuras materiales que den cuenta de esas necesidades.
El Estado, de acuerdo con su obligación, dio un gran paso cuando por intermedio de la Ley 26.522 de Servicios de Comunicación Audiovisual, dictó una nueva regulación para la utilización del espectro radioeléctrico. No obstante, en lo que refiere a la palabra impresa aún reina el vacío.
Las exigencias del caso, como bien se manifestó anteriormente, buscan que todos los argentinos sin importar en que rincón del país vivan, puedan encontrar herramientas comunicacionales que den cuenta de los acontecimientos que los rodean y de sus intereses, en equitativa proporción con lo que sucede en otra parte.

Al mismo tiempo se intenta favorecer a producciones periodísticas locales o regionales, sin que dependan, como en la actualidad, de las directrices vertidas desde el Área Metropolitana de
Buenos Aires (AMBA). El Federalismo o las autonomías provinciales, consignas tan proclamadas por muchos, se defienden con la garantía de que las voces autóctonas tengan los canales que las amplifiquen y les den fuerza.
El bien común se construye en la esfera pública a través del debate público, entre actores con distintos intereses y porciones de poder. La inequitativa distribución de la riqueza y de los bienes simbólicos recaen sobre los más débiles y robustecen las adquisiciones de los más fuertes.

Por estos días estamos asistiendo a la convergencia en un solo bloque de poder, de las corporaciones mediáticas y de otros rubros. Con la idea de presionar para seguir manteniendo sus privilegios, descartan el uso de la libertad de expresión y del debate deliberativo en la esfera pública.
El pasado 24 de agosto el diario Clarín manifestaba con acierto en su editorial que “controlar el papel es controlar la información”. Dicha frase podría quedar como una aseveración verdadera sino fuera que quien la pronuncia detenta, prácticamente, el monopolio de la producción de papel para diarios, con sus consecuentes beneficios, hasta el punto de imponerse por encima de las demás publicaciones, para establecer la agenda pública de discusión que lleva a cabo el conjunto de la sociedad.

Desde su única perspectiva e interés se elabora, casi en su totalidad, el decálogo de temas que debe discutir la ciudadanía. Técnicamente, a este proceder se lo denomina agenda-setting, que es cuando los medios o algunos de ellos en particular influencian sobre la opinión pública y en soportes informativos, que operan con estos en red, por debilidad en su arquitectura económica o por subordinación ideológica. En este contexto, configurar lo público implica una tarea extremadamente difícil si no se produce una reubicación de los medios más cercana a la ciudadanía, de un proyecto de país inclusivo de las mayorías y si no se procesan cambios en las instituciones y en las estructuras de los poderes existentes.

2010-09-01

EL Macrismo en tiempo de descuento

Por Juan Pablo O· Dezaille


La ciudad de Buenos Aires parece fácil de gestionar: piloto automático; un buen slogan publicitario: Haciendo Buenos Aires, y se la va llevando.
Sí hay promesas de campaña incumplidas, la culpa la tiene como siempre el Gobierno Nacional: que retuvo partidas, que no dio los avales correspondientes, que arrastró a la heterogénea oposición local en la Legislatura para ponerle palos en la rueda al ex presidente de Boca.
Sin embargo, lo que no entiende el Ingeniero, el que venía a resolver los problemas de los porteños con la nueva política, es que el modelo gerencial que impuso le hace agua por todos lados.







No solamente son las escuchas y el procesamiento (datos para nada menores), sino ahora también se suman los colegios secundarios, que se caen a pedazos, la falta de aulas en las primarias y pre-escolares de la zona sur, los hospitales a los que les faltan insumos mínimos y el aumento de la mortalidad infantil en los lugares más vulnerables de esta misteriosa Buenos Aires. El Jefe de Gobierno Porteño pasea por París, mientras en Palermo, la desidia o la corruptela (o un poco de ambas), termina con la vida de dos adolescentes.

Sin embargo, Macri está preocupado porque los chicos y las chicas hacen política. Esas declaraciones a días de un nuevo aniversario -el número treinta y cuatro- de La Noche de los Lápices, no es casual. Apunta a que el miedo le resuelva de cara a la sociedad, lo que la política no puede. La derecha puede alegar cualquier cosa, pero nunca que no sabe de lo que habla.

Igualmente, apoyarse en lo peor del sentido común de los noventa, ya no le dará resultado. Tampoco seguir congraciándose con Clarín, que hace rato le soltó la mano y busca entre los escombros del Grupo A de Diputados, otro candidato que califique para poder enfrentar a Néstor o a Cristina en el 2011.


Así anda, Mauricio por estos días, encerrado en Avenida de Mayo, con las cartas marcadas, sin siquiera con la mínima convicción para dar vuelta el tablero.

Algunos le recomiendan que se quede en la ciudad y la proyecte a Michetti de vice de alguna de las fórmulas opositoras. Otros, lo alientan que siga contra viento y marea la carrera presidencial.


Mientras tanto, al kirchnerismo porteño nos cuesta ordenar nuestros objetivos: elaborar un proyecto integrador para Buenos Aires que contemple al área metropolitana. Sin Proyecto Nacional no hay proyecto para la ciudad. Sin política territorial y para las comunas, no hay gestión transformadora. El 2011, como el futuro de la canción de los Redondos: llegó hace rato.

Hoy muchos Pinos hacen un Pinedo

Por Pablo Castillo


Para los que en los ochenta transitábamos las facultades en la primavera alfonsinista, la Hora de los Hornos, era una referencia insoslayable. ¿Cómo explicarle a nuestros compañeros de cursada que el movimiento nacional y popular más importante de Latinoamérica, no se agotaba en Lorenzo Miguel, Luder o Herminio Iglesias? ¿Cómo sostener que ese peronismo que quería volver a enamorar -como decía el Canca desde los afiches- convocando a construir una JP unificada, poco tenía que ver con los mariscales de la derrota y la quema de cajones? Que estaba conformado por una rica historia de conquistas sociales, luchas y resistencia.





En el sesenta y ocho, la Hora… daba cuenta como lo escribía el propio Solanas “de años épicos y violentos, liberadores y represivos, llenos de rupturas, sueños y utopías. (…) Del resurgimiento de esa violencia gorila que se expresaba en el bombardeo a la población civil en 1955” y que se sintetizaba en las proscripciones, los presos políticos y los silencios de la prensa del régimen.

Casi veinte años después, el propio Solanas, trataba de cerrar artísticamente -aunque bastante más discutible desde lo político- la parábola de destierros externos e internos con otras dos películas: Sur y el Exilio de Gardel.
Y, si bien, -más allá del aire europeizante de sus últimas producciones- que para nuestro gusto militante le faltaban un poco más de adrenalina y código genético, también entendíamos que esa estética perforaba los límites de lo nac and pop más duro y permitía acercarnos genuinamente a generaciones mucho más chicas.

Después vino su incierto camino político: el primer acercamiento a Menem, las peleas con Chacho Álvarez por las candidaturas, el refugio parisino y el regreso a la ciudad. Y, más allá de que muchas de su posturas estaban sostenidas desde una mirada individualista, sin construcción colectiva ni disputa de poder real a los sectores neoliberales y hegemónicos de los noventa, siempre aparecía al menos en el discurso: corriendo por izquierda.

Sin embargo, la llegada del Kirchnerismo trastocó todo. Si mis banderas son tus banderas, entonces ya no son mis banderas, parece decir buena parte de la cofradía progre porteña urbana, que se sentía mucho más cómoda operando en las coordenadas binarias que proponía el menemismo, de buenos y malos, que asumir los riesgos de los grises de la política real. De la vida real.

El tema Papel Prensa, dejó expuesto con mayor nitidez y visibilidad, el grado de confusión de Pino y Proyecto Sur sobre la cuestión de los medios.
Mientras el cineasta defendía a Magneto y al Grupo Clarín, su diputada más lúcida, Alcira Argumedo, escribía una columna de opinión en el diario Tiempo Argentino criticando a la Presidenta porque ante la gravedad de los hechos denunciados lo que ameritaba era lisa y llanamente: la expropiación.

Las horas que se avecinan no serán sencillas. No se trata de hacer tampoco kirchnerismo bobo pero si no nos enfrentamos a las corporaciones mediáticas no hay ninguna posibilidad de democratizar la palabra, ni sortear las críticas conservadoras a la ley de medios ni las chicanas judiciales.

Si las mayorías de las posiciones críticas que se le hacen a los K desde Proyecto Sur, son consecuencia de un problema de narcisismo mal resuelto, la ciudad de Buenos Aires tiene un número de psicólogos y psicoanalistas con diferentes orientaciones, muy capaces para atender estos problemas. Si en cambio, la apuesta es ser la izquierda del Grupo A de Diputados, una lástima. Por la historia, personal y política.

Igual, si ese es el horizonte, la derecha los recibirá –por un rato, al menos- con los brazos abiertos. Desde el campo nacional y popular lo único que les podemos decir es que: SIGAN PARTICIPANDO….

La escuela macrista

Por Rodrigo Karasik. Ex Presidente Centro de Estudiantes Normal Nº6
Agrupación Política Envido (Juventud Peronista - Kolina)



No se requiere una gran habilidad para estropear una maquinaria en buen funcionamiento, sin embargo, encontrar la pieza justa que termine de destruirla, eso no es tan fácil. Mauricio heredó una ciudad donde la salud, la educación, la maquinaria estatal en general funcionaba mal, pero funcionaba. El año que viene nos dejará una ciudad fuera de servicio. Esa es la característica saliente de este jefe de gobierno, en ello consiste la escuela Macrista, su capacidad inigualable para destruir.


Así, del mismo modo que esta escuela desarmó el sistema de salud, hoy salta a la luz cómo la misma suerte le toca a la educación.
Esta novedad, claro, no nos llega de la mano de los medios -muchos de ellos cómplices de esta escuela- sino de la movilización de un estudiantado que ante el desconocimiento sistemático de este gobierno, debió recurrir a medidas de fuerza. Medidas que -siempre respetando el sesgo pacifico y democrático- sacan a la luz el abandono a la educación publica y ponen en jaque a un gobierno que ya no tiene donde esconderse de su propia realidad.

Pero la escuela macrista no está hecha de improvisados por lo menos no en ciertas prácticas. Así es como funcionarios PRO intentan descalificar estos reclamos con declaraciones que aseguran: ‘’detrás de esto hay motivos políticos’’ y nos recuerdan tanto a los años 90, donde la política estaba demonizada y vedada para la juventud como medio de protesta y de cambio.
Este discurso viene acompañado de una fuerte persecución que incluye listas negras, servicios y trabajo de inteligencia en los colegios llevándonos a una época más oscura aún de la historia Argentina.

Pese a todo eso, estos estudiantes se hacen cargo del lugar que les toca y nos hablan de democracia. De cómo todas las medidas se deciden desde el consenso, en asambleas donde se participa al total del estudiantado y de cómo pese al miedo, a las amenazas y las conductas persecutorias de este gobierno, eligen día a día mantener su lugar y dar la cara por la recuperación de la educación, o por lo menos de condiciones dignas para estudiar.
Al respecto, Carla, una dirigente estudiantil del Normal 6 que prefiere ocultar su apellido por razones de seguridad pese a saber que forma parte de las tenebrosas listas negras, nos narra su situación: ‘’Nosotros estamos jugados, sabemos que estamos en las listas negras y es por eso que ahora más que nunca no podemos bajar los brazos’’

También cuenta cómo mientras se intenta descalificar sus intenciones y principios, ellos en realidad rescatan valores importantes como la solidaridad ya que el movimiento estudiantil no reclama por la situación particular de cada colegio sino por la totalidad y por la educación en general, y destaca la gravedad de haber tenido que llegar a esta instancia para que los dirigentes se den cuenta que no sólo existen los directivos y profesores, sino que también hay estudiantes que piensan y tienen derechos.

Por su parte Julia, dirigente del Lengüitas contó las reivindicaciones del movimiento estudiantil, entre las que destacó entre otras cuestiones: 1.- El aumento y ejecución del presupuesto, 2.- el juicio a los responsables del deterioro de la educación. 3.- La realización de las reformas edilicias necesarias, señalando la falta de salidas de emergencia, matafuegos y condiciones de seguridad, que en su ausencia, despiertan el fantasma de Cromagnon, tan presente para esta generación de jóvenes. 4.- La calefacción y ventilación, ausente en la mayoría de los establecimientos. 5.- La resolución del problema de las viandas que llegan incompletas y en mal estado destacando el desprecio de la gestión PRO por los estudiantes en situación más vulnerable 6.- Una mejor y mayor distribución de las becas que ya habían sido centro de conflicto con los estudiantes en el 2008.

Julia también destacó la consolidación del movimiento estudiantil desde ese entonces, recordando que en 2.008 fueron quince los colegios tomados y hoy el número asciende a veinticuatro. Este crecimiento lo atribuye a una generación que vivió muchos cambios y que gradualmente se despierta del individualismo que le imponen los medios. Agregando por último que son estos mismos medios los que desvirtúan esta lucha tratándolos de una minoría politizada, cuando en realidad la mayor parte del estudiantado esta plegado y eso se demuestra en cada una de las asambleas donde debaten los pasos a seguir en un entorno absolutamente democrático.

La conclusión es clara, Mauricio Macri y su escuela están comenzando a pagar por la falta de gestión, por el desprecio a tantos sectores, por la reducción y atrofiamiento del Estado, entre tantas otras cosas y por más escuchas telefónicas, listas negras, patotas parapoliciales como la UCEP y policía propia de dudoso origen. Porque por más voluntad mediática que exista de esconder esta realidad, el presente de Mauricio al frente de la ciudad se cae, como los techos de sus colegios.

La Noche de los Lápices: un símbolo de la resistencia a la dictadura militar

Los seis estudiaban en el Colegio Número 3 de la ciudad de La Plata y tenían entre 14 y 18 años. Al sacarlos de sus casas esa madrugada, los comandos del siniestro Batallón 601 del servicio de Inteligencia del Ejército y la Policía de la Provincia de Buenos Aires afirmaron que en unas horas estarían de vuelta. Mentían. Fue entre el 16 de septiembre y la madrugada del 17. El mismo día en que los militares festejaban 21 años del Golpe que derribó a Perón. Cuando la secuestraron a Emilce Moler tenía 17 años y militaba en la Unión de Estudiantes Secundarios (UES). Ella, Gustavo Calotti --actualmente radicado en Francia-- y otra chica que vive en La Plata son, junto a Pablo Díaz, los sobrevivientes de la llamada Noche de los Lápices. Ahora tiene más de cincuenta años, está casada, tiene tres hijos y vive en Mar del Plata desde que los militares la obligaron a dejar La Plata. El reportaje que le hizo Victoria Guinzberg, hace ya casi doce años, mantiene una vigencia conmovedora y es también un homenaje a una de las víctimas menos conocidas de ese trágico suceso.





"Teníamos un proyecto político", dice en relación a que las desapariciones de los secundarios de La Plata no se debieron exclusivamente a la lucha por el boleto estudiantil. Reivindica su militancia y afirma que "la pelea por una sociedad más justa en la que todos tengan dignidad y trabajo sigue absolutamente vigente. Y si seguir pidiendo justicia es un idealismo sigo siendo idealista".

--¿Por qué su nombre no se asocia con La Noche de los Lápices?

--No fue algo deliberado. Fui cuidadosa porque la cosa pública es muy difícil de sostener a lo largo del tiempo. Sabía que tenía que tener otros objetivos en mi vida, pero también fueron historias de desencuentros. Hablé sobre el tema desde el primer momento, pero no estar en La Plata ni en Buenos Aires influyó muchísimo. A lo largo de estos años eso se ha ido modificando.

--¿Cómo era su vida antes del secuestro?

--Estaba en quinto año de Bellas Artes. Era muy alegre, llena de vida, con muchos ideales. En la vida cotidiana estudiaba dibujo, me dedicaba al grabado y me preocupaba por qué carrera iba a seguir.

--¿Estudió algo relacionado con el arte?

--No, soy matemática. La historia me cambió mucho. Salí a los 19 años de la cárcel de Devoto con libertad vigilada y rendí quinto año libre. Me sentía bastante vieja, quería tener una independencia económica y estudiar una carrera de arte me significaba mucha dependencia. Además tenía miedo, pensaba que me podían mirar peor si estudiaba arte. Busqué algo que no tuviera nada que ver con la realidad y elegí matemática.

--¿Cuándo pudo conectarse de vuelta con la realidad?

--Fui siguiendo los pasos que siguió el país. En el '82 estaba en los últimos años de la facultad y ya estaba participando de los incipientes centros de estudiantes. Tuve el aislamiento necesario para protección, nada más. Estuve inmersa en toda la problemática de Malvinas y luchando por la democracia.

--¿Qué se acuerda de la noche del secuestro?

--Desgraciadamente todo. Fue entre las 3 o 4 de la mañana del 17 de setiembre. Llegó una patota grande de hombres fuertemente armados a mi casa y encañonaron a mis padres con armas largas. Buscaban a una estudiante de Bellas Artes. Cuando aparezco yo, que era muy chiquita, parecía menos de 17 años, no me querían llevar. Se iban a llevar también a mi hermana mayor, finalmente, como no había lugar en el auto, a ella la dejaron. Era un plan deliberado pero también jugaba mucho el azar.

--¿Qué pasó después?

--Me encapuchan, me atan, me meten en un auto y me llevan a un lugar que, mucho tiempo después, supe que era el centro clandestino de Arana. Ese es uno de los recuerdos más dolorosos que tengo porque durante toda la semana recibí torturas y en los momentos en que no me torturaban a mí, escuchaba cómo torturaban a otros. Ahí me encontré con Gustavo Calotti. También pude reconocer los gritos de dolor de Horacio Ungaro y compartía la celda con Claudia Falcone y María Clara Ciochini y con otras personas más. Lo que se puede contar de esos momentos es el horror, la situación límite, la degradación como ser humano, como mujer. Es indescriptible. Después de una semana en Arana me trasladan. A los chicos que hoy están desaparecidos los hacen bajar en otro lugar, los que sobrevivimos continuamos.

--¿Adónde la llevaron?

--A la Brigada de Investigaciones de Quilmes. Allí no recibí tortura física, pero seguía vendada, atada, en calidad de desaparecida. Después pasé a la comisaría 3ra de Valentín Alsina, en Lanús, donde me sacaron las vendas y me desataron, pero todavía estaba ilegal. En enero del 1977 me legalizaron y pasé a la cárcel de Devoto, siendo menor. En Arana era como que no tenía conciencia, no sabía lo que pasaba al minuto siguiente en mi vida. Pero cuando cerraban las rejas de la celda me sentía morir. Hasta que recibí las primeras visitas. Como siempre, rescato la solidaridad de los compañeros. Pasé algo más de un año y medio en Devoto hasta que me dieron la libertad vigilada y me dijeron que me vaya de La Plata, debía ser muy peligrosa. Con mi familia decidimos venir a Mar del Plata.

--¿Volvería a vivir en La Plata?

--Me costaría mucho reconstruir mi vida en La Plata. Es una ciudad que me trae mucho dolor porque en cada calle veo las imágenes de los compañeros que hoy no están, que desgraciadamente son muchos más que estos seis chicos que están desaparecidos, y son ausencias que duelen mucho. Tardé veinte años en volver a mi escuela.

--Su padre era comisario inspector ¿cómo vivió el secuestro?

--Fue durísimo. Si bien no sabía lo que estaba pasando porque ya era jubilado, tenía más noción que mi mamá de lo que podía ocurrirme. Nunca fue un policía demasiado convencido, así que desde lo ideológico no fue tan terrible, pero como padre sintió que no podía hacer nada, que su cargo no le servía, que después de una vida íntegra de trabajo tenía que pedir por la vida de su hija y no le daban bolilla. Se puso en el rol de padre, no en el de policía, y luchó conmigo a brazo partido, me comprendió y me apoyó, igual que mi madre, y pienso que eso fue una de mis llaves de salvación.

--¿Qué le cuenta a sus hijos sobre la dictadura?

--Tenemos el tema instalado de una manera natural. Además la mayoría de nuestros amigos vivieron esos años y también aportan. Lo más importante es que no me vean derrotada, abatida, ese sería el principal triunfo de los militares. Me ven íntegra, con ganas de seguir hablando, luchando y sin miedo a participar. Eso es lo que les trato de transmitir.

--¿En qué cambió en estos años?

--No cambié mucho, salvo por los años y las arrugas. Nunca me arrepentí de lo que pensaba. Pelear por una sociedad más justa, que todos tengan dignidad y trabajo, me parece que sigue siendo absolutamente vigente. Y si seguir pidiendo justicia en este país es un idealismo sigo siendo idealista. Cambié en la pasión que ponía en esas cosas y en tomar conciencia de que no vamos a ser protagonistas de ningún cambio importante. Pero bueno, seremos una buena retaguardia.

--¿Qué le pareció la película La Noche de los Lápices?

--Muestra lo que significó la desaparición de los chicos de una manera bastante fidedigna y tiene componentes de película respecto de las historias de alrededor. Hay que rescatar que sirvió para que este hecho se conozca. Ese es un mérito indiscutible, pero hay que recrearlo con verdaderas historias. Creo que con La Noche de los Lápices se hizo un modelo de lo que pasó en nuestro país, que hay que recrearlo con lo que fue dejado de lado y lo que yo y otros podamos aportar no entra en contradicción con lo que se sabe sino que muestra una dimensión más profunda del horror.

--La Noche de los Lápices se asocia a la lucha por el boleto estudiantil pero usted habla de una lucha política más amplia.

--No creo que a mí me detuvieran por el boleto secundario, en esas marchas yo estaba en la última fila. Esa lucha fue en el año '75 y, además, no secuestraron a los miles de estudiantes que participaron en ella. Detuvieron a un grupo que militaba de una agrupación política. Todos los chicos que están desaparecidos pertenecían a la UES, es decir que había un proyecto político, con escasa edad, pero proyecto político al fin.
Septiembre de 1998

Foro de San Pablo en Buenos Aires

Entre el 17 y el 20 de agosto pasado se realizó en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el XVI Encuentro del Foro de San Pablo. El evento fue cerrado por el Presidente de la Unasur, Néstor Kirchner y en la Declaración Final se resaltó el buen momento que en términos políticos- sociales está viviendo Latinoamérica con la presencia de gobiernos progresistas en la mayoría de sus países. Frente a la invisibilidad que sometieron a este importante Encuentro Regional, los principales medios de comunicación hegemónicos se transcriben a continuación la opinión de tres periódicos importantes del continente, que cubrieron tanto las Mesas Redondas como las Comisiones de Debate.






Diario de la Juventud Comunista Cubana - Juventud Rebelde

La especial significación que para Latinoamérica y el Caribe tiene la influencia emanada del ejemplo de la Revolución cubana, es realzada por el Foro de Sao Paulo en un documento cuya discusión comenzará este martes aquí, informaron sus organizadores. El triunfo de la Revolución cubana mediante una genuina guerra popular, dirigida por el Comandante Fidel Castro, constituyó un hito decisivo en la historia de América Latina", subraya el texto, elaborado por el Grupo de Trabajo (GT) del Foro. Las alusiones al proceso revolucionario en la Isla forman parte del análisis de los 20 años transcurridos desde el surgimiento en 1990 de este espacio partidista de socialización de experiencias y de articulación de acciones de solidaridad.

En ese sentido, el documento base para la XVI Reunión del Foro de Sao Paulo, con sede en Buenos Aires (Argentina), se, subraya que la realidad que vive hoy la región "es producto de un movimiento múltiple y de las luchas que se llevaron a cabo en las últimas décadas". Puntualiza que fue la insurrección boliviana, caracterizada como una combinación inédita de rasgos antiguos y modernos, la que abrió a Evo Morales el camino a la presidencia. Del mismo modo, agrega, la congregación en el Palacio de Miraflores permitió la radicalización del giro "bolivariano" del dignatario venezolano Hugo Chávez, y la victoria electoral del presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva no puede comprenderse sin la lucha obrera. El documento base constata por otra parte que en las dos últimas décadas se ha generado una creciente fraternidad y un acercamiento entre los gobiernos progresistas, los partidos, los movimientos sociales y los pueblos de nuestros países. Destaca entre las distintas expresiones de integración regional la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América Latina y el Caribe (ALBA) y la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR). Sin embargo, afirma, un paso más grande se dio en la Cumbre de la Unidad Latinoamericana y Caribeña, celebrada en la Riviera Maya en febrero de este año, con la constitución de un organismo regional, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).

La XVI Reunión del Foro de Sao Paulo, que por primera vez se realiza en Argentina, reunió a unos 200 participantes. El FSP reúne a partidos de izquierda, centro izquierda y progresistas latinoamericanos, y fue fundado en 1990 por el Partido de los Trabajadores de Brasil en Sao Paulo, de donde tomó su nombre.

Diario BRAZIL

Kirchner llama a la solidaridad en Foro de Sao Paulo. El secretario general de la Unasur, el argentino Néstor Kirchner, llamó el viernes a la solidaridad y a ``terminar con situaciones que afectan los derechos humanos'' en Latinoamérica, al encabezar un acto con los asistentes al Foro de Sao Paulo, que concluyó en Buenos Aires.

Tenemos que ser solidarios con América Latina'', además de ``construir y profundizar las políticas sociales'' en toda la región, consideró Kirchner, acompañado por el ex presidente de Honduras Manuel Zelaya, derrocado en junio del 2009 por un golpe de Estado.

El ex mandatario argentino (2003-2007) y secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) instó además a promover ``procesos que coloquen a América Latina como una región que se recupere de su proceso económico, educativo, social y de inclusión, que se terminen situaciones que afectan los derechos humanos y que todos tengan la posibilidad de expresarse''.”Se empiezan a ver acuerdos que permitirán construir la Patria Grande con la que soñamos... Siempre nos van a ver defendiendo los intereses latinoamericanistas'', sostuvo Kirchner, esposo de la presidenta argentina, Cristina Fernández.

Zelaya recibió esta semana un fuerte respaldo de los participantes de la decimosexta edición del Foro de Sao Paulo, que aglutina a fuerzas de izquierda.

``El foro rechaza el golpe (que derrocó al ex jefe de Estado), rechaza el Gobierno (de Porfirio Lobo) elegido en una situación de ilegitimidad, y reconoce a Zelaya'', sostuvo el pasado martes el dirigente del oficialista Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil Walter Pomar, al iniciar la reunión desarrollada en la capital argentina.

Zelaya volvió a instar al actual mandatario hondureño, Porfirio Lobo, a ``aceptar'' las recomendaciones que realizó en julio pasado la OE

DIARIO DE VENEZUELA

Jóvenes de unas 50 organizaciones, movimientos y partidos políticos progresistas de la región se concentraron en la Ciudad de Buenos Aires, Argentina donde celebraron el II Encuentro del Foro de São Paulo. La actividad se enmarca en el XVI Encuentro del Foro de São Paulo. La actividad se realizó en la Universidad de Las Madres de Plaza de Mayo. Los jóvenes debatieron sobre las realidades de sus países en tres comisiones de trabajo: Educación, Trabajo, Cultura y Comunicación.
Luego de la discusión, los jóvenes redactaron una declaración final. Entre otras cuestiones, acordaron continuar apoyando los cambios progresistas que se vienen dando en la región de la mano de algunos gobernantes. Además rechazaron las acciones desestabilizadoras del imperialismo norteamericano y su injerencia militar en la región. Se comprometieron a defender la educación pública, gratuita y con pleno acceso para todos. Y exigieron la liberación de los cinco cubanos encarcelados injustamente en Estados Unidos. En la Comisión de Comunicación estuvieron presentes el Presidente de la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Travestis y Transexuales (LGBTT) Esteban Paulon, el Director del Centro Cultural de la Cooperación Jorge Testero y el Director de la carrera de Comunicación de la Universidad Glenn Postolski.

Paulon expuso a los jóvenes visitantes de otros países sobre la reciente aprobada Ley de Igualdad en Argentina, que permite a las parejas del mismo sexo acceder al matrimonio y tener los mismos derechos que las parejas heterosexuales. En este sentido, señalaron que en su país este año el parlamento votó en contra a una medida que buscaba someter a referéndum una ley que permitiría la unión legal de parejas del mismo sexo.

En materia de Comunicación y Cultura, los compañeros del movimiento universitario del Frente Sandinista de Nicaragua y del Partido Comunista y Partido Socialista Unido de Venezuela, contaron los avances que han alcanzado sus gobiernos y movimientos en este tema. En Nicaragua, recientemente fue creado un canal de televisión del Frente Sandinista (antes el movimiento sólo contaba con radios en diferentes partes del país) y sólo queda un canal de “derecha” que le hace oposición al actual gobierno. Los jóvenes nicaragüenses señalaron que “callamos a la derecha, ya no pueden decir que el gobierno no está haciendo nada”. Manifestaron que el único problema actual lo representan los medios de comunicación impresos (diarios) que siguen tergiversando la información. Indicaron que tienen un desafío, pues “la mayoría de los jóvenes universitarios son nacidos en la década de 1990, en la época neoliberal, es difícil cambiarles la mentalidad, la conciencia consumista”.
Xoan Noya, Coordinador de Relaciones Internacionales de la Juventud del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), indicó que “este tipo de encuentros, en las cuales los jóvenes nos ponemos de acuerdo en la caracterización y ejecución de las políticas de América Latina, demuestra que si es posible trascender la integración hacia la unidad política que próceres como Bolívar, Martí o San Martín propusieron en el Siglo XIX”.

Por otra parte la venezolana Alejandra Melendez señaló que el gobierno venezolano ha avanzado mucho en leyes de inclusión y participación cultural y en regulación y democratización de los medios de comunicación, en especial luego del golpe de estado mediático contra el Presidente Hugo Chávez en abril de 2002. Sin embargo manifestó que “todavía hoy significa un desafío grande ante el continuo ataque de los medios nacionales e internacionales al proceso bolivariano”.

Jóvenes del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) del Salvador, expusieron la realidad que viven en su nación, en el que los medios de comunicación han contribuido al aumento de la delincuencia, el surgimiento de pandillas y la pérdida de la identidad salvadoreña de sus ciudadanos debido a la transmisión de programas estadounidenses y mexicanos. “Estamos trabajando en la recuperación de nuestra identidad”, “queremos una reforma a la ley de comunicaciones y a la ley de educación”, manifestaron los compañeros. Luego de la discusión, los jóvenes redactaron una declaración final. Entre otras cuestiones, acordaron continuar apoyando los cambios progresistas que se vienen dando en la región de la mano de algunos gobernantes. Además rechazaron las acciones desestabilizadoras del imperialismo norteamericano y su injerencia militar en la región. Se comprometieron a defender la educación pública, gratuita y con pleno acceso para todos.

La ciudad subsidia a colegios que cobran cuotas de hasta $ 1600

Por Lucia Álvarez


Lo indica un informe de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia, que solicitó un habeas data para que el gobierno porteño ofrezca detalles sobre esa subvención. La medida fue apelada por la administración macrista. La ciudad subsidia a colegios que cobran cuotas de hasta $ 1600. En lugar de especificar el criterio y los detalles acerca de los cuantiosos recursos públicos que se destinan a subvencionar colegios privados, el gobierno porteño apeló una medida de la justicia que obligaba a brindar esa información, por pedido de una ONG. Según informes de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) y de legisladores de la oposición porteña, en plena crisis de la educación pública, la administración macrista subsidia a escuelas privadas que cobran cuotas de hasta $ 1600 mensuales, con un presupuesto fijo de más de 800 millones de pesos, y que se calcula que superará los 900 millones por incrementos salariales.





En julio de este año, la jueza en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad, Alejandra Petrella, hizo lugar a la acción de habeas data de ACIJ, que ordenó al GCBA proporcionar en quince días, y bajo apercibimiento de recibir sanciones, la información detallada sobre el criterio, los montos y los porcentajes de los aportes entre 2006 y 2010.
Ahora la ONG pidió que se rechace la apelación y se confirme la sentencia, argumentando que el gobierno de la ciudad sólo contestó uno de los tres pedidos y que, en los otros dos, la información es “incompleta, escasa y contradictoria”. Por ejemplo, no hay datos sobre los montos de los aranceles, ni sobre los valores absolutos de los subsidios que recibe cada instituto, así como tampoco si fueron autorizadas cuotas extraordinarias para mantenimiento. También aseguran que en la página Web faltan datos de los años 2006, 2007 y 2008 y que en los cuadros correspondientes a 2009 hay graves contradicciones, como el hecho de que 130 instituciones educativas figuran con distintos aranceles, a pesar de que no varía ni el nivel educativo ni la modalidad.

El legislador del Encuentro Popular para la Victoria, Francisco “Tito” Nenna, vicepresidente de la Comisión de Educación de la Legislatura, advirtió en un informe que los colegios que más subsidios reciben son aquellos que cobran cuotas de alto valor, como “el San Columba, con un arancel de $ 648,52 para la escuela media, el Instituto Summa, con un arancel para primaria de $ 733,91; Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús, cuyo arancel informado es de $ 1189,80 para la escuela media y de $ 1094 para la primaria”. También señaló que la distribución de dinero es mayor en los distritos de clase media y alta ($ 14.956.236,17) y muy inferior en aquellos de clases medias y bajas ($ 6.610.120,78).
A su vez, el informe de ACIJ compara el porcentaje de subsidios destinado a la masa salarial docente, con la cuota que cobra cada institución. Por ejemplo, el colegio La Salette recibe un subsidio del 100% y cobra un arancel de $ 345,20, y el colegio Mekhitarista percibe un monto del 60% y su cuota alcanza los $ 1616.

Antes de llegar a la justicia, la ONG había hecho dos pedidos de informes a la Dirección General de Educación de Gestión Privada amparados en la Ley 104, pero no hubo respuesta.
Tanto el artículo 65 de la Ley de Educación Nacional como el artículo 25 de la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires determinan que la contribución estatal destinada a salarios docentes debe estar basada en criterios objetivos de justicia social y dando preferencia a las instituciones que reciben alumnos de menores recursos. Sin embargo, ACIJ estableció que sólo el 50% de los cuantiosos recursos se destinan a escuelas con aranceles más bajos.
Las conclusiones de la ONG son elocuentes: “Parte del aporte estatal destinado a educación de gestión privada contribuye a profundizar desigualdades educativas entre los sectores más pobres y ricos de la ciudad”, porque el presupuesto que se destina a esas escuelas con altas cuotas “se sustrae de la educación de gestión estatal, a la que asisten los alumnos que padecen peores condiciones de acceso a la educación”.

2010-08-01

Ocho definiciones sobre el Frente Transversal Nacional y Popular

Por Edgardo Depetri

El gobierno y las convicciones, el poder económico, los dirigentes y la militancia, la derrota del 28 de junio, los cargos y las disputas internas, la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) y la política internacional. Un análisis sin desperdicios.




EL FRENTE Y EL GOBIERNO: Nosotros nos sentimos parte de todas las luchas que libró el pueblo argentino en los últimos 30 años, con tanto sacrificio de miles de compañeros y compañeras. La verdad que como espacio político estamos orgullosos de participar y ser protagonistas en el gobierno de Cristina Kirchner. Que estemos logrando ser parte de un proyecto que empezó con Néstor Kirchner, cuando asumió en el 2003.
EL FRENTE Y LAS CONVICCIONES: Néstor siempre afirmó que no llegaba a la Casa Rosada para representar los intereses de ninguna corporación económica, ni sojera exportadora, agropecuaria, ni financiera; de ninguna corporación. Y el Gobierno de Cristina Kirchner continúa con ese mandato popular, representa el interés el pueblo argentino. Nosotros, como parte de ese proyecto, como parte de ese Gobierno y como parte de nuestra historia política, sindical, personal, estamos llamados a hacer exactamente lo mismo. No podemos detenernos ni una vez, desviarnos ni un poquito, del mandato fundacional de nuestros compañeros, de nuestra historia.
EL FRENTE Y EL PODER ECONÓMICO: La Mesa de Enlace, Biolcatti, la Sociedad Rural, los bancos, esos enemigos, son los que nosotros estamos enfrentando, y ellos tienen el multimedios Clarín. Para los grupos económicos, la comunicación es lo más importante, el agente central que tiene ese poder para deslegitimar al gobierno, arrinconarlo, debilitarlo, para intentar derrotarlo. Hoy debemos ser conscientes que estamos en un nivel de confrontación con el poder económico en la Argentina. No sólo vienen por Néstor Kirchner, vienen por todos nosotros. Los que quieren venir a hacerse cargo del país quieren volver a instalar la política de represión, de ajuste, de desocupación, de la caída salarial, de la falta de salud, de la falta de educación, de la falta de previsión social.
EL FRENTE, LOS DIRIGENTES Y LA MILITANCIA: Nosotros convocamos a los compañeros, nadie nos vino a buscar a nuestras casas, nadie nos vino a convencer para ser delegado, para ser dirigente, presidente de una cooperativa, para ser referente o para ser legislador, para ser intendente o para estar en el gobierno nacional. Nosotros nos ofrecemos. Queremos. Planteamos nuestra voluntad, y convocamos a los compañeros. Entonces, lo que hagamos o dejemos de hacer tiene mucho que ver con la decisión de los dirigentes, no es problema de la gente, de los compañeros, sino de los dirigentes. Cómo hacer para construir la mejor organización con la mejor propuesta, que entusiasme, que enamore, que nos convoque a ser protagonistas, para que no crean los compañeros que hay un referente que les resuelve, que hay alguien que les da, y que si hoy te lo da, mañana te lo puede sacar. Entonces, no es eso de comprar voluntades ante la necesidad. Nosotros venimos a plantear otra política y otra forma de construcción a los compañeros.
EL FRENTE Y LA DERROTA DEL 28 DE JUNIO DEL 2009: Ese día a las 2 de la mañana en el local del Frente Transversal, cuando evaluamos lo que podía pasar, todos éramos conscientes de la derrota política que nos había infligido el Poder. La mayoría parlamentaria que habían logrado en el Congreso, podía sumirnos en otra crisis financiera vinculada a una devaluación escandalosa de la moneda nacional, o a una campaña de inseguridad, para tirarle al gobierno de Cristina Kirchner un par de muertos frente a la Casa Rosada y, que derivara en una salida anticipada del gobierno de Cristina Kirchner. Eso que una vez fue una posibilidad del Poder, nosotros lo teníamos como parte de nuestra agenda. Porque si hay algo que uno tienen que saber todos aquellos que quieran conducir un proyecto transformador, una organización capaz por sí misma de convocar a los compañeros para fortalecer el proyecto nacional, que siempre hay que estar preparados para lo peor, no para lo mejor.
EL FRENTE, LOS CARGOS Y LAS DISPUTAS INTERNAS: Nosotros no disputamos cargos electorales ni oficiales evaluando si el candidato es Néstor o Cristina Kirchner, Scioli, algún otro gobernador o un intendente del conurbano. Nosotros no especulamos con qué porción del espacio Kirchnerista nos corresponde, porque siempre creímos y creemos en el proyecto que encabezan los compañeros Cristina y Néstor Kirchner. No andamos viendo cómo saltamos a hacer otro partido político ni buscando algún atajo por centro izquierda; no arreglamos con algún grupito que nos permita pelear alguna candidaturita a nivel nacional, a nivel local o a nivel provincial. No andamos pensando en cómo zafamos de esta coyuntura, de esto que perdimos, de cómo recomponemos para que el Frente perdure y siga siendo una orga que nos permita seguir o, estando en el candelero, para que alumbre sólo a cuatro o cinco dirigentes, figurando en algún diario en algún titulito, o en algún programa de televisión para decir que estamos siendo parte de la discusión. Nosotros planificamos y construimos un proyecto con eje en el desarrollo territorial.
EL FRENTE Y LA CTA: La discusión en la CTA para aquellos que venimos de ATE, o de los sindicatos que fuimos fundantes, no es una cuestión menor, es una cuestión principal de nuestra construcción. No da lo mismo discutir la elección en función de un proyecto que discutirla en función de cuestiones personales. No es un problema personal la discusión con Víctor De Gennaro, es una discusión política. Nosotros, con Germán Abdala y con Víctor De Gennaro, denunciamos que la ley de Reforma Administrativa y de privatización que mandaba en su momento Menem al Congreso, iba a significar el ajuste más violento que iba a sufrir la sociedad y no solamente iba a condenar a la desocupación a los compañeros, sino que lo peor, iba a organizar un nuevo tipo de Estado, el Estado privado, el Estado para los ricos. Pero lo que nos juntó hace 20 años hoy nos diferencia. Y, esas diferencias tienen que ver en cómo vemos la etapa, las cuestiones del país, para dónde hay que ir. Qué CTA necesitan hoy los trabajadores y el pueblo argentino. Por eso vamos a bancar a Hugo Yasky como candidato a Secretario General y vamos a participar todos en el proceso electoral, con el enorme dolor de cruzarnos, en los distritos y en los sindicatos de los que somos parte, con los compañeros con los que hemos compartido la vida, en las buenas y en las malas.
EL FRENTE Y EL MOVIMIENTO SINDICAL MUNDIAL: Hace unos días Cristina habló en la Confederación Sindical Mundial. El movimiento sindical mundial se unificó el año pasado después de 50 años de división como consecuencia de la guerra mundial y lo que después fue la guerra fría y los bloques en que se dividió el mundo, occidente, oriente, capitalista o socialista. Cristina habló ahí, ante delegados de los trabajadores que hoy están haciendo paro general. En Francia hacen paro general contra las reformas de la jubilación que está implantando el gobierno de Sarkozy, en España en contra de la rebaja de los salarios de los trabajadores estatales, en Grecia estalló el país, muy parecido a la crisis que nosotros vivimos en el 2001.
El movimiento sindical para los tiempos que vendrán es clave para poder discutir con el único dueño del poder real, que no son los gobiernos. Los gobiernos son una parte del Poder, pero el poder real son las empresas, el capital, el que puede decidir el nivel de inversión, los niveles de ganancia, cuántos empleos va a ofrecer, qué salario va a pagar y, en general, el poder económico, salvo en honrosas excepciones, ha controlado a los Estados y a controlado a los gobiernos. Y Cristina pudo hablar ahí, ante miles de delegados de todos los sindicatos del mundo, que nos pusieron como referencia, como ejemplo, porque tiene la legitimidad de un gobierno que ha recuperado el trabajo como perspectiva y que no ha ajustado como lo planteaba el Poder.